Ejes Temáticos
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La Ëtica en los Negocios
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Toda relación humana, exige un comportamiento que permita que ésta fluya de manera positiva; que las personas tengan su conducta dentro de los parámetros y un buen obrar. Pero es innegable que en las relaciones laborales, los intereses encontrados entre capital y trabajo, en ocasiones desvÃan el comportamiento hacia rumbos distintos de los paradigmas sociales, por lo que es de retomarse y fortalecer los conceptos derivados de la ética, como la mejor forma de armonizar los intereses encontrados. El comportamiento ético, no garantiza que las relaciones laborales estén basadas en la buena fe, principio esencial de toda relación jurÃdica, que obliga a las partes a que en todas sus actuaciones se antepongan a los intereses personales, los intereses de la comunidad y que permitan salvaguardar las fuentes de empleo que son indispensables para que el trabajo como generador de riqueza, pueda cumplir con su propósito.
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La Cultura Laboral de Hoy y del Futuro
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Las nuevas formas de vida en la sociedad del conocimiento y de la información, resultado de las nuevas tecnologÃas de la información y la comunicación (TIC), han obligado a replantearnos no sólo los modos de producción, sino a crear nuevos modelos de relación entre los Estados, las EconomÃas, las Instituciones, por supuesto entre las Personas y desde luego en las Relaciones de Trabajo. Hoy tenemos que rediseñar las relaciones laborales, a partir de las nuevas economÃas de mercado del mundo globalizado, sin perder de vista en ningún momento, que, los derechos de los trabajadores, históricamente les corresponden como un resultado, que el respeto y la dignidad del hombre trabajador, como lo han señalado las normas internacionales del trabajo y la totalidad de las legislaciones nacionales, no es objeto de comercio. Hoy y para el futuro, tenemos el gran reto de encontrar las fórmulas que armonicen a los factores de la producción, en este nuevo modelo globalizado de producción, pero que al propio tiempo garanticen al trabajador la seguridad del bienestar personal y de la familia.
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El Sindicalismo Actual
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La naturaleza humana, bien lo decÃa Platón, es la del hombre en sociedad. Hoy nadie duda que la libertad de asociarse es un derecho fundamental, y ésta misma razón, explica la existencia de la asociación profesional, de los iguales; su propósito, la defensa de los intereses que les son comunes. Hoy las relaciones laborales son distintas, los actores sociales en esta relación también. Los requerimientos de la productividad han cambiado, porque cada dÃa son más complejas y mayores las exigencias en la competitividad. La libertad sindical es una meta de la Organización del Trabajo, asà lo dice su convenio y por ende, el sindicalismo actual deberá modificar sus estructuras, sin perder su esencia, para seguir siendo el medio ideal de defensa de los intereses de sus agremiados e insertarse a los nuevos tiempos laborales que exigen la corresponsabilidad.
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​Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de los Trabajadores Informales y Migrantes
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Realidades lacerantes como la pobreza y el desempleo, son problemas de los que devienen los dos fenómenos que hoy ocupan todos los escenarios a nivel mundial, la migración y el trabajo informal. Estos fenómenos envuelven a millones de personas en el mundo, que no han encontrado en sus paÃses alternativas para enfrentar el gravÃsimo problema de la pobreza, y que si bien por esta vÃa resuelven lo básico, se encuentran desprotegidos por la carencia de derechos laborales esenciales como la estabilidad en el empleo, el salario decente, el trato digno y la seguridad social. Son los Trabajadores Informales los que hoy a través de la EconomÃa Informal, participan de manera importante en el mercado de consumo. La falta de empleo formal, fortalece las economÃas de muchas naciones, aún asà carecen de derechos laborales y seguridad social. Los trabajadores migrantes, son hoy por hoy tema de actualidad. Los flujos de estos trabajadores se han dado en todos los tiempos y en todas las naciones, no es otra cosa más que la necesidad de mitigar el hambre, las polÃticas públicas deben ver este fenómeno no como un problema de fronteras y nacionalidades, sino como un efecto de problemas sociales o no atendidos o mal atendidos, porque el derecho a la sobrevivencia es un derecho humano.
propósito.
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